2 de noviembre 2023
Hoy, 1 de noviembre, Día de todos los Santos, he vivido una hermosa experiencia . Realmente conmovida por el afecto, respeto, admiración y consideración recibidas por mis buenos compañeros, excelentes amigos que organizaron y asistieron a este Almuerzo de Despedida.
Más que agradecida a la Universidad Monteávila (UMA), a su actual Rector, mi muy estimado Ing. Guillermo Fariñas, al equipo Directivo de la Universidad. Un millón de gracias para mi querida Amiga, Arq. Aixa Armas, Presidente de Mujer y Ciudadanía, con quien he trabajado hace muchos años en la Asociación Mujer y Ciudadanía (MyC), que en trabajo conjunto con la UMA, desarrolla un excelente programa de formación: Diplomado Mujeres como Agentes de Cambio y Diplomado Participación Política y Ciudadana. Soy miembro del Consejo Consultivo de M y C. Hace varios años recibí el Premio Mujer Analítica.
Mis sentimientos de gran afecto y cercanía al Equipo de M y C, a mis exalumnos de los Diplomados en todos estos años.
Mi primera actividad en la UMA, se remonta al año 2008, aproximadamente, cuando el Dr. Enrique Pérez Olivares, me invitó a dictar la Lección Inaugural, en ese tiempo, me desempeñaba como Decano de la Facultad de Humanidades y Educación de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB). Desde ese momento, se sucedieron muchas actividades y proyectos significativos. Tuve la satisfacción de participar como Profesora Invitada y Ponente en eventos y actividades académicas, cuando también era Rector, el Dr. Francisco Febres-Cordero Carrillo, mi sobrino.
Han sido años muy importantes y significativos para mi crecimiento personal, profesional y académico. Gracias por tanto!
Hoy, me siento agradecida y honrada.
Hoy, me siento muy feliz, porque me acompañaron mis queridos Hermanos, Dr. Francisco de Paula y Mons. Rafael María Febres-Cordero Briceño; hoy, estoy llena de alegría por la presencia de mi querido sobrino, Padre Gerardo Febres-Cordero Carrillo.
Que más puedo pedir… Agradecer a Dios…
Desde lo más profundo de mi corazón, les saludo afectuosamente, agradezco su distinguida e invalorable presencia. Cuentan siempre con mi amistad y compromiso.
Un abrazo fraterno y las seguridades de mi alta estima.