Fuente: Descifrado
Susana Raffalli, nutricionista, especialista en seguridad alimentaria e investigadora de Cáritas de Venezuela, precisó que «cuando dicen que 6,5 millones de personas en el 2021 estaban en situación de hambre, es porque la capacidad que tiene el Estado para garantizar la alimentación de la nación alcanza solo para 22 millones de los 28 que somos».
Sostuvo en una entrevista con César Miguel Rondón que en sociedades tan desiguales como la venezolana, «hay grandes grupos de población que no pueden comer lo mínimo ni siquiera hipotecando sus medios de vida».
«Es extraordinariamente desafortunado decir que tenemos 6,5 millones de personas que se quedarían sin comer si la despensa nacional se repartiera», añadió.
Sin embargo, dijo que a pesar de que el número de personas que «padecen hambre en Venezuela es muy alto y alarmante, ha venido mejorando, porque en el trienio anterior eran más de 9 millones de personas, y ahora son 6,5 millones».
«La cifra de 6,5 millones de venezolanos que padecen hambre es 3 veces más grande que las personas en situación de hambre en América del Sur», precisó.
Raffalli comentó que «tenemos con qué para ser el país con la despensa alimentaria más rica del continente, así que todo lo que está pasando aquí se debe a decisiones políticas y a una administración del recurso alimentario nacional muy precaria».
«En Venezuela, hay una proporción enorme de personas que están comiendo lo mínimo necesario para mantener la vida, pero no una condición de vida saludable», alertó.
Igualmente, indicó que «el poder adquisitivo alimentario del venezolano es tres veces menos que el costo promedio de una dieta saludable».