Una mujer y su hijo asesinaron a más de 25 hombres en una ola de crímenes en Ciudad Juárez, México
Fuente: El Universal
3 de diciembre 2023
Las historias se solapan. Unos hechos violentos tapan otros, y así, crímenes atroces quedan ocultos tras otros peores. Unos asesinos tapan a otros.
Esta historia ocurre en el estado de Chihuahua, México, específicamente en una ciudad que pasó a la historia por una ola de crímenes contra mujeres que se convirtieron en ejemplo de su vulnerabilidad en toda Latinoamérica.
En este caso nos encontramos ante una despiadada asesina serial que, junto a su hijo, se dedicó a matar para robar. Es la historia de Flor Cazarín González, conocida como “La Madrina”, y su hijo Roberto Rodríguez Cazarín, alias “El Tocino”, condenados a más de 40 años de prisión. Pero los juicios en su contra no han concluido, por lo que se espera que continúen acumulando condenas.
La historia se inicia en 1976 cuando nació Flor en el estado de Chihuahua, en el seno de un hogar pobre. De su infancia no se sabe nada, pero, como en muchos casos de personas que nacen en ambientes dominados por la pobreza y la violencia, su niñez estuvo marcada por el abuso.
La fama de Flor llegó a los medios tras su condena por los asesinatos de dos mujeres, Carlota Muñoz Durán y Griselda Mojarro Delgado. Pero los investigadores creen que La Madrina podría estar involucrada en al menos 25 casos más, todos contra hombres de mediana edad y adultos mayores, a quienes enamoraba, robaba y asesinaba brutalmente.
La Madrina no trabajaba sola, su hijo, tan sanguinario como ella, la acompañaba, y otros sujetos colaboraban en los robos. Su modus operandi era sencillo: le hacía seguimiento a quienes serían sus víctimas, se presentaba “casualmente” y establecía relaciones sentimentales hasta que los drogaba y asesinaba. Luego sus cómplices saqueaban la casa y disponían de los cadáveres.
Pero sus crímenes fueron descubiertos cuando la Agencia Estatal de Investigación (AEI) determinó que el 11 de julio de 2016 La Madrina, en compañía de su hijo y de otra persona, asesinaron a Carlota Muñoz Durán en su residencia.
El cadáver de Carlota fue localizado el 14 de julio y la autopsia determinó que fue sedada y tenía 91 puñaladas en el tórax.
En noviembre de 2016, drogó, plagió y asesinó a Griselda Mojarro, cuyo cuerpo abandonó en un terreno baldío. La golpearon en la cabeza con un martillo y la apuñalaron 18 veces.
Posteriormente, un juez de control tomó declaraciones a dos testigos, quienes afirmaron que La Madrina había cometido más asesinatos de los que se sabía.
Esas fuentes señalaron que los asesinatos de La Madrina podrían llegar a 25. Entre ellos está la muerte de Gilberto Muñoz García, de 70 años, cuyo cadáver decapitado fue localizado meses más tarde.
“Yo quiero saber dónde enterró la cabeza de mi papá, le cortaron la cabeza y nunca ha aparecido. Que me diga dónde la escondió; no la dejen salir”, suplicó la hija de Muñoz García.
Flor Cazarín es enjuiciada por este caso y se espera sea condenada, junto a su hijo, próximamente, mientras se acumulan más casos en su contra.