
3 de mayo 2024
Las mujeres a lo largo de la historia hemos cumplido un rol esencial en la sociedad, aunque en muchos aspectos nuestro liderazgo haya sido invisibilizado. En el marco de la conmemoración de un hito en la historia mundial de la lucha de los derechos de las mujeres, resaltar y reconocer los atributos de nuestro liderazgo cobra una gran importancia en tanto que el logro de los sueños, metas, y objetivos que nos planteamos tanto a nivel personal como profesional, pasan por fortalecer y utilizar de manera estratégica nuestras capacidades y potencialidades.
Una mujer del siglo XXI que busque cumplir con su propósito de vida y convertirse en una empresaria exitosa, debe actuar del ser para el hacer en base a los principios de sororidad, lealtad y compromiso, y desarrollar 5 habilidades blandas: organización y planificación, flexibilidad y adaptación al cambio, innovación, eficacia e intuición, todas esenciales desde el ámbito de la gestión empresarial para enfrentar los retos que nos plantea el presente y futuro.
La organización y la planificación como competencias, suponen trabajar principalmente desde cuatro recursos: tiempo, prioridades, esfuerzos y personas. tiempo, entendido como el recurso más escaso y costoso que puede existir; prioridad como visión estratégica para decidir qué hacer primero; esfuerzo como inversión de los recursos necesarios para poder lograr los objetivos; y persona como capital humano indispensable que moviliza los procesos y las acciones dentro del emprendimiento o empresa, y con el cual nos relacionamos constantemente.
La flexibilidad y adaptación al cambio, implican la capacidad de evaluar constantemente el contexto, para llevar a cabo las transformaciones necesarias en función de conseguir los objetivos propuestos, tomando en cuenta que los cambios pueden producirse a una velocidad acelerada.
La innovación supone la posibilidad de hacer las cosas de manera diferente, gestionando recursos para suplir las necesidades humanas, a través del impulso del trabajo en red desde una visión colaborativa, y de la utilización de la tecnología y de las nuevas herramientas en el área de la información y comunicación. Todo lo cual permite la Integración de las mujeres en el ecosistema digital y por tanto el cierre de brechas.
La eficiencia se entiende como la capacidad de dar el mejor uso a los recursos para alcanzar los objetivos planteados, lo que supone la necesidad de enfoque para poder obtener las ganancias esperadas, y el diseño de objetivos desde la metodología SMART (objetivos específicos, medibles, alcanzables, relevantes y temporales).
La Intuición implica la capacidad de pensar rápido, no esperando tener toda la información, para tomar las decisiones de manera inteligente y a tiempo. Es lo que llamamos el sexto sentido, a partir de la cual según señalan estudios empresariales se toman el 80% de las decisiones de las decisiones que llevan el modelo de negocio al éxito.
La valoración de estas capacidades nos invita a las mujeres a reflexionar sobre qué nos hace exitosas como emprendedoras y/o empresarias. Para encontrar el éxito debemos encontrar respuestas para algunas preguntas: ¿Qué talentos y habilidades tengo?, ¿Cuáles son las competencias que debo fortalecer?, ¿Qué me apasiona hacer?. El ser mujeres exitosas pasa por entender que al final del día el liderazgo implica amar, aprender, desaprender y volver a aprender, y que es necesario seguir atreviéndonos a explorar con creatividad e innovación campos que eran considerados en el pasado solo de hombres.
@asepulveda58